
PARASHÁ 29 Ajarei Mot
Levítico 16:1-18:30
Significa “después de la Muerte”. Comentarios
PRIMERA Aliyá, 16:1-17
El capítulo 16 de Vayikrá es uno de los capítulos más importantes de la Torá. En este capítulo se encuentran las instrucciones acerca del día de expiación, Yom Hakipurim que cae en el 10º día del 7º mes de Tishrí. Ese día fue el único de todos los días del año cuando el gran sacerdote podía entrar en el lugar santísimo y presentar incienso y sangre ante la presencia de YHWH. El propósito de ese acto es hacer una limpieza general de los pecados y las impurezas de los hijos de Israel que se habían acumulado en el tabernáculo durante todo el año. A pesar de que YHWH dio instrucciones claras acerca de cómo los hijos de Israel tenían que mantenerse alejados de las impurezas rituales para no contaminar el santuario por medio de ellas, era inevitable que el tabernáculo fuese contaminado por ellas. Si alguien entraba en el santuario estando impuro, lo contaminaba. Podían haber entrado allí sin darse cuenta de que estaban. Por esto YHWH instituye este día de expiación para purificar los objetos del tabernáculo terrenal.
La reconciliación entre YHWH y el hombre es el tema central de toda la Escritura y este capítulo muestra cómo esta reconciliación puede ser efectuada. La ira de YHWH está sobre el hombre por causa de sus pecados. Esa ira es mortal para el hombre. Lo único que puede aplacar esa ira es que YHWH muestre misericordia. Esa misericordia es mostrada al hombre mediante la reconciliación sobre la base de sacrificios sangrientos de vidas inocentes, como está escrito en Levítico 17:11: “Porque la vida de la carne está en la sangre, y yo os la he dado sobre el altar para hacer expiación por vuestras almas; porque es la sangre, por razón de la vida, la que hace expiación.”
Este capítulo constituye también uno de los mejores textos que explican lo que pasó con el Mesías Yeshúa antes y después de su resurrección al ser introducido en el ministerio sumo sacerdotal celestial según el orden de Malki- Tsedek. Él entró en el tabernáculo celestial y lo purificó con su propia sangre, como está escrito en Hebreos 9:22-26: “y según la Torá (En este caso se traduce como ley), casi todo es purificado con sangre, y sin derramamiento de sangre no hay perdón. Por tanto, fue necesario que las copias de las cosas en los cielos fueran purificadas de esta manera, pero las cosas celestiales mismas, con mejores sacrificios que éstos. Porque el Mesías no entró en un lugar santo hecho por manos, una copia del verdadero, sino en el cielo mismo, para presentarse ahora en la presencia de Eloah por nosotros, y no para ofrecerse a sí mismo muchas veces, como el sumo sacerdote entra al Lugar Santísimo cada año con sangre ajena. De otra manera le hubiera sido necesario sufrir muchas veces desde la fundación del mundo; pero ahora, una sola vez en la consumación de los siglos, se ha manifestado para destruir el pecado por el sacrificio de sí mismo.”
El día 10 del mes séptimo está reflejado en el día 10 del primer mes. En el 10º día del primer mes fue tomado un cordero para cada casa en Mitsrayim donde se iba a celebrar Pesaj para luego poder salir de la esclavitud bajo el rey Paró. El cordero de Pesaj fue designado el día 10 del primer mes para luego ser sacrificado el día 14. El día 10 del séptimo mes tiene conexión con el cordero de Pesaj. La sangre del cordero de Pesaj protegió a los primogénitos de la muerte. La carne del cordero produjo vitalidad y sanidad en los cuerpos débiles y enfermos. De manera parecida los sacrificios de yom HaKipurim expían por los pecados de los hijos de Israel para salvarlos de la muerte, como está escrito en Levítico 16:30: “porque en este día se hará expiación por vosotros para que seáis limpios; seréis limpios de todos vuestros pecados delante de YHWH.”
Pesaj está íntimamente conectado con Yom Kipur. De la misma manera la muerte y resurrección del Mesías Yeshúa (Jesús), que sucedió en Pesaj, cumplió también gran parte del servicio de Yom Kipur en el tabernáculo celestial. Él ha entrado en el lugar santísimo en el cielo y se ha quedado allí durante casi 2000 años. Como el sumo sacerdote no solamente entró en el lugar santísimo en el tabernáculo terrenal, sino luego salió y bendijo al pueblo, así sabemos que el Mesías no se va a quedar en el lugar santísimo en el cielo, sino salir de allí para bendecir a los hijos de Israel y el mundo entero. Así que Mashíaj ha cumplido sólo la mitad del culto de Yom Kipur. Con su regreso a la tierra cumplirá el resto. En ese día todo el pecado será eliminado en los que han puesto su esperanza en él, como está escrito en Hebreos 9:27-28: “Y así como está decretado que los hombres mueran una sola vez, y después de esto, el juicio, así también el Mesías, habiendo sido ofrecido una vez para llevar los pecados de muchos, aparecerá por segunda vez, sin relación con el pecado, para salvación de los que ansiosamente le esperan.”
16:1 “YHWH habló a Moshé después de la muerte de los hijos de Aharón, cuando se acercaron a la presencia de YHWH y murieron.”
Según najmánides este enunciado fue dado un día después de que los hijos de Aharón entraron en el tabernáculo con fuego extraño y murieron. Sin embargo, Rashí señala que fue el mismo día en que murieron, es decir el primer día de nisán (Aviv). Así que en el mes de Aviv, un poco antes de la celebración de Pesaj, fue anunciado el mensaje acerca de Yom Kipur. Esto también conecta la celebración de Pesaj con Yom HaKipurim, como está escrito en Juan 1:29: “Al día siguiente ve a Yeshúa que venía hacia él, y dice: He ahí el Cordero de Eloah (Pesaj) que quita el pecado del mundo (Yom Kipur).”
“Después de la muerte”
El nombre de esta Parashá es Ajarei mot, “después de la muerte” Apunta a lo que iba a pasar con el Mashíaj (Mesías) después de su muerte. Cuando entró en el lugar santísimo, en el Mishkán celestial y cumplió así con esta sombra profética, como está escrito en Hebreos 9:11-12: “Pero cuando el Mesías apareció como sumo sacerdote de los bienes futuros, a través de un mayor y más perfecto tabernáculo, no hecho con manos, es decir, no de esta creación, y no por medio de la sangre de machos cabríos y de becerros, sino por medio de su propia sangre, entró al Lugar Santísimo una vez para siempre, habiendo obtenido redención eterna.”
16:2 “dijo YHWH a Moshé: di a tu hermano Aharón que no en todo tiempo entre en el lugar santo detrás del velo, delante del propiciatorio que está sobre el arca, no sea que muera; porque yo apareceré en la nube sobre el propiciatorio.”
Aharón, como gran sacerdote, tenía acceso al lugar santísimo, pero sólo una vez al año. Moshé, sin embargo, podía entrar en el lugar santísimo en cualquier momento.
El hecho de anunciar la prohibición de entrar en el lugar santísimo después de hablar de la muerte de los hijos de Aharón, indica que ellos podían haber intentado entrar allí sin permiso, lo cual sería una de las razones por las cuales murieron. Para evitar que esto ocurriera otra vez, YHWH dio instrucciones muy concretas de cómo se debe de entrar allí y quién podrá entrar allí.
La palabra hebrea que ha sido traducida como “propiciatorio” es “kaporet” que significa “cobertura”, “cubierta”. Viene de la raíz “kafar” que significa “cubrir (con brea)”, “calafatear”, y también “perdonar”, “absolver”, “compensar”, “expiar”. Es la misma raíz que hay en la palabra para el día de expiación, yom HaKipurim, también llamado yom Kipur, conferenciar. Levítico 23:27; 25:9. En la traducción de los setenta, la Septuaginta, la palabra hebrea “kaporet” fue traducida al griego como “hilasterion”, que significa “sacrificio expiatorio”, “lugar expiatorio”, “propiciatorio”. La palabra “hilasterion” viene de “hilaskomai” que significa “conciliar”, “propiciar”, “expiar”, “reconciliar”, “agraciar”. El propiciatorio es visto como el trono de YHWH en la tierra.
Esta cubierta no solamente servía para tapar el arca, sino también como un lugar de expiación por los pecados y donde se manifiesta la misericordia y el perdón. Es un lugar de reconciliación entre YHWH y el hombre. Por esto se ha traducido también como “trono de la gracia” según está escrito en Hebreos 4:14-16: “Teniendo, pues, un gran sumo sacerdote que trascendió los cielos, Yeshúa, el Hijo de Eloah, retengamos nuestra fe. Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras flaquezas, sino uno que ha sido tentado en todo como nosotros, pero sin pecado. Por tanto, acerquémonos con confianza al trono de la gracia para que recibamos misericordia, y hallemos gracia para la ayuda oportuna.”
El propiciatorio, el trono de la misericordia, la cubierta sobre el arca, no podía ser visto por más que una sola persona en un día al año. Sin embargo, cuando el Mesías vino él fue expuesto públicamente como un lugar de expiación, un propiciatorio, como está escrito en Romanos 3:25-26: “a quien Eloah exhibió públicamente como propiciación por su sangre a través de la fe, como demostración de su justicia, porque en su tolerancia, Eloah pasó por alto los pecados cometidos anteriormente, para demostrar en este tiempo su justicia, a fin de que Él sea justo y sea el que justifica al que es de la fe de Yeshúa.”
La palabra griega que ha sido traducida como “propiciación” es “hilasterion”, que hemos visto antes. Esta palabra aparece sólo en dos lugares en los textos griegos del Código Real. En Hebreos 9:5 fue traducida como “propicia- torio”. Como hemos visto antes, en la LXX, “hilasterion” es la traducción de la palabra hebrea “kaporet” que es la cubierta del arca del testimonio. El texto griego de Romanos 3:25, está diciendo es que el Mesías fue mostrado como un propiciatorio, como la cubierta del arca que está en el lugar santísimo en el templo celestial y en el templo terrenal. En su muerte, Yeshúa fue expuesto públicamente como un propiciatorio, relacionado con el culto de Yom Kipur. Con la ejecución sangrienta del Mesías, todo el mundo ahora podía ver que hay purificación y eliminación eterna de los pecados, no solamente para los judíos, sino para los del mundo entero, como está escrito en 1 juan 2:2: “El mismo es la propiciación por nuestros pecados, y no sólo por los nuestros, sino también por los del mundo entero.”
También en 1 juan 4:10: “En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Eloah, sino en que Él nos amó a nosotros y envió a su Hijo como propiciación por nuestros pecados.”
El lugar de encuentro entre YHWH y el hombre está encima del arca en el templo, como está escrito en Éxodo
25:22: “Allí me encontraré contigo, y de sobre el propiciatorio, de entre los dos querubines que están sobre el arca del testimonio, te hablaré acerca de todo lo que he de darte por mandamiento para los hijos de Israel.”
También en Éxodo 30:6: “Pondrás el altar delante del velo que está junto al arca del testimonio, delante del propiciatorio que está sobre el testimonio, donde yo me encontraré contigo.”
Ahora, según el texto griego de Romanos 3:25, Yeshúa fue expuesto como un propiciatorio ante todo el mundo. de la misma manera que el propiciatorio fue un lugar de encuentro entre YHWH y Moshé, el sacrificio de Mashíaj es un lugar de encuentro entre YHWH y la humanidad, como está escrito en Juan 12:32-33: “Y yo, si soy levantado de la tierra, atraeré a todos a mí mismo. Pero él decía esto para indicar de qué clase de muerte iba a morir.”
El propiciatorio es un lugar donde YHWH se manifiesta de una manera extraordinaria. El propiciatorio existe en tres niveles:
1. En el tabernáculo y el templo terrenales.
2. En el templo del cuerpo del Mesías.
3. En el templo celestial.
Como YHWH se manifestó de manera extraordinaria sobre la muerte y resurrección de Mashíaj, allí da a conocer Sus cualidades. Vamos a destacar cuatro de ellas:
1. Su justicia. La justicia de Eloah exige que el pecador tenga que sufrir la muerte. Para poder perdonar al pecador YHWH tiene que suplir con un sustituto. Sin un sustituto que sea hermano del pecador, no es posible que se haga remisión. Un animal no puede sustituir a un hombre. Si YHWH redimiera al hombre del pecado y de la muerte a base de los sacrificios de los animales, no sería justo. Por medio de la muerte de Yeshúa manifiesta que es justo cuando perdona al pecador, conferenciar. Romanos 3:25-26.
2. Su misericordia y amor. Por medio de la muerte de Yeshúa, todos los hombres de la tierra podrán ser hechos hijos eternos de Eloah por medio del perdón de sus pecados y la liberación de la muerte, conferenciar. Juan 3:16; 1 Juan 3:1.
3. Su fidelidad. En la muerte y resurrección del Mesías en el tercer día, YHWH cumple sus promesas dadas a los profetas.
4. Su poder. Mediante la resurrección y transformación del cuerpo de Yeshúa en un cuerpo inmortal y su glorificación y supresión de todo dominio, se ha manifestado su enorme poder, cf. efesios 1:19-21.
16:3 “Aharón podrá entrar en el lugar santo con esto: con un novillo para ofrenda por el pecado y un carnero para ofrenda de ascensión.”
Aharón sólo puede entrar en el lugar santísimo por medio de la muerte de animales sustitutos que señalan proféticamente hacia la muerte del Mesías. Esto nos enseña que la muerte de Yeshúa es la base sobre la que el hombre puede acercarse a YHWH.
Cuando había templo el kohén gadol, el gran sacerdote, se preparaba una semana antes de este día, que es el más sagrado del año. Salió de su casa para pasar la última semana en el santuario. Durante siete días se purificaba con el agua purificadora de la vaca roja por si había tocado un cadáver humano sin darse cuenta, como está escrito en Números 19:11-13: “El que toque el cadáver de una persona quedará inmundo por siete días. Y aquél se purificará a sí mismo de su inmundicia con el agua al tercer día y al séptimo día, y entonces quedará limpio; pero si no se purifica a sí mismo al tercer día y al séptimo día, no quedará limpio. Cualquiera que toque un cadáver, el cuerpo de un hombre que ha muerto, y no se purifique a sí mismo, contamina el tabernáculo de YHWH; y esa persona será cortada de Israel. Será inmundo porque el agua para la impureza no se roció sobre él; su impureza aún permanece sobre él.”
Durante esos siete días también era instruido por talmides sabios que el sanedrín le había enviado, para que cumpliera con el servicio de yom Kipur de manera correcta. Un sustituto también era preparado en caso de que el kohén gadol se quedara tamé e incapaz de oficiar. Memorizaban el capítulo 16 de Vayikrá y las halajás sobre el día de expiación hasta que el gran sacerdote las aprendía bien. Durante esa semana también ofrecía incienso y sacrificios y encendía la Menorá.
El día antes de Yom Kipur pasaban delante de él todos los animales que habían sido reservados para el evento para que los identificara bien. El último día, los talmidim jajamim (discípulos sabios) fueron reemplazados por un grupo de kohanim (sacerdotes) que ayudaron al gran sacerdote a practicar el arte de verter incienso en sus manos con una cuchara. Este servicio tenía que hacerse delante de YHWH en el lugar santísimo y fue una de las cosas más difíciles, porque no podía caer ni un grano del incienso a la tierra.
Durante la noche antes del gran día, el gran sacerdote no dormía. Estaba leyendo capítulos de Job, Esdras, Crónicas y Daniel para poder quedarse despierto. Si se dormía, los sacerdotes jóvenes lo despertaban haciendo ruidos con sus dedos. Si se cansaba podía estar de pie un rato sobre el suelo frío del templo. Otras personas de Yerushalayim también se quedaban despiertas durante esa noche, leyendo y orando y preparándose para el gran día.
16:4 “Se vestirá con la túnica sagrada de lino, y los calzoncillos de lino estarán sobre sus carnes, y se ceñirá con el cinturón de lino y se cubrirá con el gorro de lino (estas son vestiduras sagradas). Lavará, pues, su cuerpo con agua y se vestirá con ellas.”
Cada año había nuevas ropas para este evento tan especial y fueron usadas solamente durante ese día. Las ropas normales que usaba el gran sacerdote en su servicio diario, de ocho prendas, tenían mezclas de oro y piedras preciosas junto con telas y tintas que habían sido sacadas tanto del mundo animal como del mundo vegetal. Las ropas que fueron usadas para entrar en el lugar santísimo vinieron solamente del mundo vegetal. Estas ropas de lino expresan humildad ante la presencia de YHWH.
La primera vez que aparece el lino en las Escrituras es en Génesis 41:42 donde habla de Yosef que fue vestido de lino por mano del Paró (Faraón) en el momento de su exaltación. Esto nos enseña que hay una relación entre la exaltación de Yosef después de haber estado en la cárcel, y el ministerio sumo-sacerdotal de Yom Kipur. Todo esto nos lleva al Mesías ben Yosef que fue vestido de lino en el momento de su muerte, como una señal de su investidura en el ministerio sacerdotal según el orden de Malki-Tsedek que iba a iniciar después de su resurrección, conferenciar. Juan 19:40.
“lavará su cuerpo”
En Yom Kipur el sumo sacerdote hizo tevilá de todo su cuerpo en total cinco veces. Cada vez que cambiaba la ropa sumergió todo su cuerpo en agua y lavaba sus manos y pies antes y después. En total lavó sus manos y sus pies diez veces durante ese día.
Primero hizo la tevilá antes de ponerse las ropas de oro para iniciar el servicio de todos los días como gran sacerdote. Después vertía agua sobre sus manos y sus pies y ofrecía el sacrificio diario del cordero de la mañana, quemaba el incienso y limpiaba la Menorá. Luego ofrecía la ofrenda diaria de oblación, minjá, seguido por parte del sacrificio adicional, musaf, de Yom Kipur, como está escrito en Números 29:7-11: “El décimo día de este mes séptimo tendréis santa convocación y os humillaréis; no haréis ningún trabajo. Y ofreceréis a YHWH una ofrenda de ascensión como aroma agradable: un novillo, un carnero, siete corderos de un año, sin defecto; y su ofrenda de cereal, flor de harina mezclada con aceite: tres décimas de una efá por el novillo, dos décimas por el carnero, una décima por cada uno de los siete corderos; y un macho cabrío como ofrenda por el pecado, además de la ofrenda de expiación por el pecado y de la ofrenda de ascensión continua, de su ofrenda de cereal y de sus libaciones.”
Después purificó sus manos y sus pies y se quitaba las ropas de oro. Se sumergía en agua y se ponía las cuatro ropas de lino, hechas para la ocasión con la tela más fina. Otra vez echaba agua sobre sus manos y sus pies para estar listo para el siguiente servicio.
16:5 “y tomará de la congregación de los hijos de Israel dos machos cabríos para ofrenda por el pecado y un carnero para ofrenda de ascensión.”
Estos animales fueron dados para la expiación del pueblo.
16:6 “Entonces Aharón acercará el novillo como ofrenda por el pecado, que es por sí mismo, para hacer expiación por sí mismo y por su casa.”
Según Rashí, este es el novillo que fue mencionado en el versículo 3. El gran sacerdote tenía que pagar este novillo de su propio bolsillo. En este momento él puso sus manos sobre la cabeza del novillo y confesó sus propios pecados y los de su familia. Según Rashí, la palabra expiación, que normalmente tiene que ver con la sangre, en este caso significa una confesión de los pecados. Según Rambám usó estas palabras:
“Por favor, YHWH, pequé sin intención, cometí transgresiones intencionalmente e insolentemente delante de ti, tanto yo como mi familia. Por favor, YHWH, expía los pecados involuntarios, las transgresiones voluntarias y la desobediencia que mi familia y yo cometimos ante ti, según dices en la Torá de tu servidor Moshé (Levítico 16:30), “En este día, él expiará tus pecados y te dejará puro y limpio de todo pecado ante YHWH.””
Durante todas las confesiones que el gran sacerdote hizo durante el día, pronunció el nombre de Eloah con cuatro letras, el Tetragrámaton, YHWH, diez veces en total. Cuando el pueblo oyó la pronunciación del nombre se inclinaron sobre el suelo y pronunciaron las palabras:
“Baruj shem kevod maljutó leolam vaed. (Bendito sea por siempre el Nombre de su reinado glorioso).”
16:7 “y tomará los dos machos cabríos y los presentará delante de YHWH a la entrada de la tienda de reunión.”
Los dos machos cabríos tenían que ser parecidos en aspecto, peso y altura. Fueron comprados con fondos de la comunidad.
16:8 “y echará suertes Aharón sobre los dos machos cabríos, una suerte para YHWH, y otra suerte para Azazel.”
Después de hacer la confesión sobre el novillo, no lo degolló enseguida, sino primero echo suerte entre los dos machos cabríos, que constituían una parte central en el servicio del día. Para este sorteo se usaban dos inscripciones que estaban en una urna. En una de ellas estaba escrito: “Para YHWH” y en la otra: “Para Azazel”. El kohén Gadol cogía las dos placas con sus dos manos sin mirar y colocó una sobre cada uno de los machos cabríos según estaban delante de él. Leyeron las inscripciones y proclamaban sobre el macho cabrío que había sido elegido para YHWH: “¡Este es un sacrificio jatat para YHWH!”
Se colocaba un hilo de color escarlata en la cabeza del cabrío que era para Azazel y otro hilo rojo en la entrada del lugar santo del templo. El Talmud enseña:
“nuestros rabinos enseñaron: durante los cuarenta años cuando Shimón el Justo ministraba, la suerte (“Para YHWH”) siempre salió en su mano derecha. Desde ese tiempo en adelante, a veces salió en la mano derecha y a veces en la mano izquierda. Y (durante el mismo tiempo) el hilo de color escarlata solía volverse blanco. Desde ese tiempo en adelante a veces se volvió blanco y otras veces no.”
Más adelante en el mismo tratado dice: “nuestros rabinos enseñaron: durante los últimos cuarenta años antes de la destrucción del Templo, la suerte (“Para YHWH”) no salió en la mano derecha, ni se volvió blanco el hilo escarlata...”
Cuarenta años antes de la destrucción del templo fue el año 31 del cómputo romano. Según mis cálculos, fue el mismo año de la muerte del Mesías Yeshúa. Después se su muerte el servicio de Yom Kipur no fue hecho de manera que pudiera agradar a YHWH.
¿Qué es Azazel?
Según el Talmud Azazel es un compuesto de Aza y Azael. Eran dos ángeles que antes del diluvio pidieron permiso para vivir entre los hombres con apariencia de humana para mostrar que no pecarían como los demás hombres. Sin embargo cuando obtuvieron permiso para hacer esto pecaron más que los hombres anteriores al diluvio. Rashí comenta sobre este punto que el macho cabrío se llamaba Azazel para implicar que lograba expiar pecados, entre ellos, hechos inmorales como los de Aza y Azael.
Sin embargo, en su comentario de Vayikrá, Rashí dice que Azazel designa a una montaña severa y dura, un precipicio muy elevado. En gur Aryé, que comenta a Rashí, está escrito que Azazel es un vocablo compuesto por las palabras
“az”, “áspero”, “severo”, y “el”, “fuerte”, “duro”. La aparición de la segunda zayin en Azazel no modifica en nada el hecho de que se derive de “az” y “el”, ya que en hebreo es usual que cuando un nombre se forma a partir de una o más raíces, el nombre formado casi siempre añade una letra de más por razones estilísticas. Najmánides dice que cuando está escrito que el animal fue enviado a Azazel, simplemente quiere decir que era enviado a un lugar agreste e inhóspito.
Un Midrash interpreta la palabra Azazel como hasatán o a shed, un espíritu malo. Pero como más adelante está claramente ordenado que no se puede hacer sacrificios a los demonios, esta interpretación tiene que ser cuestionada, cf. Levítico 17:7.
16:9 “Aharón acercará el macho cabrío sobre el cual haya caído la suerte para YHWH, haciéndolo ofrenda por el pecado.”
En este momento no fue degollado este macho cabrío, sino sólo designado para ser una ofrenda por el pecado.
16:10 “Pero el macho cabrío sobre el cual cayó la suerte para Azazel, será presentado vivo delante de YHWH para hacer expiación sobre él, para enviarlo a Azazel al desierto.”
Según Rashí, al decir que este cabrío tiene que ser presentado vivo delante de YHWH, implica que luego fue enviado para morir. La idea es llevarlo a un precipicio y luego arrojarlo hacia abajo para que se despedazara.
Los dos machos cabríos hablan de dos aspectos diferentes de la muerte del Mesías. La sangre de uno de ellos es llevada hasta el lugar santísimo, v. 15-16, y su cuerpo es quemado fuera del campamento, v. 27-28. El otro es enviado al desierto v. 21-22. Uno expía por el pecado, es decir, satisface la exigencia de justicia delante de YHWH, que reclama la muerte del pecador. El otro lleva el pecado lejos para que sea apartado de los hijos de Israel.
16:11 “Entonces Aharón acercará el novillo de la ofrenda por el pecado, que es por sí mismo, y hará expiación por sí mismo y por su casa, y degollará el novillo de la ofrenda por el pecado hecha por sí mismo.”
La palabra expiación se entiende aquí como una confesión verbal sobre el animal de carácter personal para el kohén gadol. Así que el gran sacerdote hizo otra confesión por todos sus pecados y por los pecados de todos los sacerdotes, que son llamados “casa de Aharón” según el Salmo 135:19. Luego degollaba el novillo y recogía
su sangre en un recipiente que fue dado a otro sacerdote.
16:12 “y tomará un incensario lleno de brasas de fuego de sobre el altar que está delante de YHWH, y dos puñados de incienso aromático molido, y lo llevará detrás del velo.”
Esta parte del servicio fue la más delicada, porque ahora le tocaba entrar en el lugar santísimo. El kohén gadol puso carbones del altar del atrio en un recipiente de oro. Le entregaron un recipiente de incienso que había sido molido extra fino para la ocasión. Tomó incienso con sus dos manos y lo puso en una cuchara. Cogió la cuchara con la mano izquierda y el recipiente con carbones en su mano derecha y entró en el lugar santísimo. Allí dentro colocó el recipiente con carbones entre las dos varas del arca. En tiempos del segundo templo, cuando no había arca, lo colocó en la piedra sobre la cual el arca había estado. Luego tomó la cuchara con la punta de sus dedos o con los dientes, para dejar ambas manos libres, y vertía el incienso en las dos manos. Esto fue muy difícil porque no podía caer nada del incienso al suelo.
16:13 “Pondrá el incienso sobre el fuego delante de YHWH, para que la nube del incienso cubra el propiciatorio que está sobre el testimonio, no sea que muera.”
Ahora el gran sacerdote ponía todo el incienso en el recipiente de oro que contenía los carbones encendidos para que se produjera una nube de humo entre él y el propiciatorio, donde se manifestaba la shejiná, la presencia gloriosa de YHWH. El humo producido por la quema del incienso sobre los carbones, que habían sido arrebatados del fuego exterior, simboliza el momento cuando el Mesías Yeshúa se presentaba ante YHWH después de su resurrección, como está escrito en Zacarías 3:2b: “¿No es éste un tizón arrebatado del fuego?”
Para que Aharón pudiera estar en el lugar santísimo cuando se manifestaba la shejiná, tenía que quemar incienso que produjera una nube que le protegía de la muerte. Por medio de esa nube él podía acercarse a YHWH sin peligro. Esa nube simboliza a Mashíaj, por medio del cual podemos acercarnos a YHWH sin peligro. Sin el sacrificio de Mashíaj el pecador muere en la presencia del Eloah Justo. El incienso que fue molido es un símbolo del Mesías, y cuando fue echado al fuego simboliza el momento cuando el Mesías murió, pasando por el fuego. Por medio de esa muerte se produjo una nube en el cielo, por medio de la cual el hombre puede acercarnos al trono de misericordia, como está escrito en Hebreos 4:14-16: “Teniendo, pues, un gran sumo sacerdote que trascendió los cielos, Yeshúa, el Hijo de Eloah, retengamos nuestra fe. Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras flaquezas, sino uno que ha sido tentado en todo como nosotros, pero sin pecado. Por tanto, acerquémonos con confianza al trono de la gracia para que recibamos misericordia, y hallemos gracia para la ayuda oportuna.”
Hebreos 10:19-22: “Entonces, hermanos, puesto que tenemos confianza para entrar al Lugar Santísimo por la sangre de Yeshúa, por un camino nuevo y vivo que él dedicó para nosotros por medio del velo, es decir, su carne, y puesto que tenemos un gran sacerdote sobre la casa de Eloah, acerquémonos con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, teniendo nuestro corazón purificado de mala conciencia y nuestro cuerpo lavado con agua pura.”
Después de haber puesto el incienso sobre los carbones encendidos, el kohén gadol salió hacia atrás, sin desviar su mirada de la dirección del propiciatorio. El pueblo estaba orando por él para que todo el servicio en el lugar santísimo saliera bien. Si había un error, el gran sacerdote moriría y el pueblo no podía obtener el perdón de sus pecados. Según el Midrash, en el tiempo del segundo templo la mayoría de los grandes sacerdotes morían dentro del año que seguía a Yom Kipur porque eran hombres corruptos y habían comprado su puesto con dinero.
Cuando el sumo sacerdote llegó al lugar santo, los otros sacerdotes salieron de allí, conferenciar. v. 17. Allí se quedó un momento y oró una oración corta y luego salió al atrio donde el pueblo le estaba esperando con ansiedad.
16:14 “Tomará además de la sangre del novillo y la rociará con su dedo en el lado oriental del propiciatorio; también delante del propiciatorio rociará con su dedo siete veces de la sangre.”
Esta sangre viene del sacrificio personal de Aharón que el otro sacerdote había estado moviendo en su recipiente para que no coagulara. Ahora el kohén gadol toma esa sangre y entra por segunda vez en el lugar santísimo. Allí esparce la sangre con su dedo hacia el lado oriental del propiciatorio una vez hacia arriba y siete veces hacia abajo sin que la sangre llegue a tocar el arca. Cuenta con voz alta mientras esparce la sangre: uno (hacia arriba), uno y uno (hacia abajo), uno y dos, uno y tres... uno y siete. De esa manera no se equivocaba.
16:15 “después degollará el macho cabrío de la ofrenda por el pecado que es por el pueblo, y llevará su sangre detrás del velo y hará con ella como hizo con la sangre del novillo, y la rociará sobre el propiciatorio y delante del propiciatorio.”
Ahora es sacrificado el macho cabrío a favor del pueblo, que había sido señalado para YHWH por medio del sorteo. La sangre fue recibida en un recipiente y luego llevada detrás del velo y esparcida de la misma manera como la sangre del novillo personal, una vez hacia arriba y siete veces hacia abajo. Luego el sacerdote sale hacia atrás al lugar santo.
16:16 “Hará, pues, expiación por el lugar santo a causa de las impurezas de los hijos de Israel y a causa de sus transgresiones, por todos sus pecados; así hará también con la tienda de reunión que permanece con ellos en medio de sus impurezas.”
Con la sangre esparcida del macho cabrío se produce la expiación por el lugar santísimo y el lugar santo a causa de las impurezas de los hijos de Israel que han contaminado el tabernáculo. Rashí dice que la expiación que se produjo con el esparcimiento de la sangre del novillo personal del kohén gadol, (v. 11) sólo fue para el sumo sacerdote y los demás sacerdotes por la impureza del santuario o de las ofrendas consagradas. Con otras palabras el esparcimiento sólo expiaba por los pecados cometidos al ingresar en el área del santuario en estado de impureza, tamé, o por haber comido carne de sacrificios en estado de tamé, o haber comido ofrendas consagradas en estado de tahor, cuando estas habían sido contaminadas. El esparcimiento de la sangre del novillo purificó el tabernáculo por las impurezas de los sacerdotes y el esparcimiento de la sangre del macho cabrío purificó el tabernáculo por las impurezas producidas por los hijos de Israel.
“así hará también con la tienda de reunión”
Al igual que roció de la sangre de las dos ofrendas en el lugar santísimo, uno hacia arriba y siete hacia abajo, así también deberá rociar sobre el velo, estando en el lugar santo, primero de la sangre del novillo y luego de la del macho cabrío, una vez hacia arriba y siete hacia abajo cada vez.
Vayikrá/ Levítico
29 Parasha Ajarei Mot
1 ° Aliyá

"Levítico 16:1 – 18:30"

